Como tantos otros a través de la historia, este explorador y conquistador español se dejó encantar por el embrujo de El Dorado, y en su búsqueda de aquella ciudad ideal encontró otro tesoro maravilloso e inconmensurable: El Amazonas. A cientos de años de este recorrido magnífico por el rey de los ríos, vale recordar al primer explorador que lo supo navegar en toda su extensión.
Nacido en Trujillo (los biógrafos aún citas varias fechas de nacimiento, desde
Durante la guerra civil entre los conquistadores en el Perú, Leal a sus parientes, se alineó con los Pizarro, apoyó la causa pizarrista e intervino junto a ellos durante el asedio de Cuzco entre 1536-1537 y en la batalla de las Salinas frente a Diego de Almagro en 1538, fue enviado por Francisco Pizarro al mando de una columna desde Lima en ayuda de Hernando Pizarro. En 1538 fue nombrado gobernador de la provincia de
En 1539 sumó al cargo de gobernador el de capitán general. Un año después se incorporó a la expedición que el nuevo gobernador de la provincia de Quito, Gonzalo Pizarro, emprendió hacia el Este en busca del país de
Siguiendo el gran río
Después de elegirlo su jefe, y tras construir dos nuevos barcos, el San Pedro y el Victoria, Orellana se lanzó a la conquista de nuevas tierras en nombre del rey de España. Entre los tripulantes de la expedición viajaba el dominico fray Gaspar de Carvajal, cuya Relación constituye la crónica del viaje.
En febrero de 1542 alcanzó las caudalosas aguas del Marañón, también conocido con los nombres de Amazonas, Orellana y Bracamoros entre otros. En su avance por el río, llegó en mayo del mismo año a Machifaro, capital del país de los omaguas, al norte de Perú, donde tuvo que hacer frente a los ataques de los nativos. Siguió río abajo y el 23 de mayo descubrió la triple desembocadura del Purús, que llamaron río de
Fue en este viaje en el que el Amazonas adquirió su nombre. Fray Gaspar de Carvajal, cronista de Orellana, escribió que la expedición fue atacada por feroces mujeres guerreras, similares a las amazonas de la mitología griega, pero es muy posible que simplemente luchara contra guerreros indígenas que tenían el pelo largo.
Desde Cubagua, Orellana embarcó hacia España. Sin embargo, tras una travesía difícil, llegó primero a Portugal, donde el rey le ofreció hospitalidad e incluso recibió ofertas para volver al Amazonas con una expedición abundantemente provista bajo bandera portuguesa. El Tratado de Tordesillas había puesto toda la longitud del Amazonas bajo soberanía castellana, mientras que los portugueses consideraban la costa brasileña como de su entera propiedad. Sin embargo, Orellana continuó a Valladolid (mayo de 1543) con la esperanza de alentar las reclamaciones castellanas de toda la cuenca del Amazonas.
Una vez en la corte, y tras nueve meses de negociaciones, Carlos I le nombra gobernador de las tierras que había descubierto, bautizadas como Nueva Andalucía. Las capitulaciones le permitían explorar y colonizar Nueva Andalucía con no menos de 200 soldados de infantería, 100 de caballería y el material para construir dos barcos fluviales. A su llegada al Amazonas, debía construir dos ciudades, una de ellas justo en la boca del río. Sin embargo, los preparativos se alargaron, debido a la falta de fondos. Finalmente, gracias a la financiación de Cosmo de Chávez, padrastro de Orellana, la expedición puede partir, no sin que antes Orellana se case con Ana de Ayala, una joven pobre, a la que pretende llevar en su viaje.
Zarpa de Cádiz, pero es detenido en Sanlúcar, debido a que gran parte de su expedición estaba compuesta por no castellanos. Finalmente, y escondido en uno de sus barcos, zarpa subrepticiamente de Sanlúcar con cuatro barcos. Uno se pierde antes de llegar a las islas Cabo Verde, otro en el curso de la travesía, mientras que otro es abandonado al llegar a la desembocadura del Amazonas. El desembarco se produce poco antes de las navidades de 1545 y Orellana se interna unos quinientos kilómetros en el delta del Amazonas tras construir un barco fluvial. Cincuenta y siete hombres mueren de hambre y el resto acampan en una isla del delta entre indios amistosos. Orellana parte en un bote para encontrar comida y la rama principal del Amazonas. A su regreso, encuentra el campamento desierto, pues los hombres habían construido un segundo bote y partido en busca de Orellana. Finalmente abandonaron y partieron costeando hasta la isla Margarita.
Orellana y su grupo siguieron tratando de localizar el canal principal, pero fueron atacados por indios caribes. Diecisiete murieron a causa de las flechas venenosas y el mismo Orellana murió durante noviembre de 1546.
Algunas crónicas del viaje
La fuente fundamental de la primera expedición fue escrita por fray Gaspar de Carvajal, el capellán que acompañó a Orellana en su exploración del Amazonas. Se trata de
Aquí, unos extractos de su relato:
"Habiendo ya pasado 11 días de febrero, se juntaron dos ríos con el río de nuestra navegación. Y eran grandes, en especial el que entra la mano diestra... El cual deshacía y señoreaba todo el otro río y parecía que le consumía sí porque venía... furioso y con... grande avenida...," contó el fraile dominico Gaspar de Carvajal, vicario de Quito y capellán, en "
Cuando Francisco de Orellana descubrió el Amazonas el 12 de febrero de 1542, tenía 31 años de edad. Había vivido 14 en las Indias desde que abandonó su ciudad natal, Trujillo, en Extremadura, España. Antes de partir desde el río Guayas al País de
'Habiéndome hallado en las conquistas de Puerto Viejo y sus términos y haber perdido en ella un ojo. Y asimismo ser notorio el servicio que hice en la dicha villa de Portoviejo en él reparo (curación) de los españoles que a mi casa acudían. Y recogí 80 hombres a mi costa y misión, pagándoles los fletes y otros gastos que debían en la dicha villa, y adeudándome en mucha cantidad y suma de pesos de oro los llevé por tierra, fin dicha jornada hice mucho fruto y gran servicio a
Francisco Pizarro había dado a Gonzalo, su hermano más querido,
Orellana navegaría río abajo en ese bergantín para buscar provisiones. Gonzalo caminaría por la ribera. Pero llegó un momento en que tuvieron que separarse y Orellana jamás volvió.
Bajó del Coca al Napo y dio con el gran río. El 24 de junio, día de los fuegos de San Juan. Los expedicionarios fueron atacados por indios comandados por amazonas, desnudas, musculosas, blancas, más altas que los indios (en realidad, eran indios de cabellera larga...). Fray Gaspar recibió un flechazo en el costado y horas más tarde en uno de sus ojos. Continuando por el río llamado desde entonces de las Amazonas llegaron al Atlántico en agosto de 1542 y regresaron a España.
Juzgado por abandonar a Pizarro, Orellana convenció a sus jueces de que no había podido regresar por el ímpetu de la corriente. Esperó meses, recibió el título de gobernador de Nueva Andalucía, que así se llamó a las riberas del Amazonas, y con su esposa Ana volvió al río fascinante con la esperanza de surcarlo hasta Coca y retornar a Quito.
Nunca pudo remontar el río y murió a consecuencia de una emboscada de los indios en noviembre de 1546. Este descubridor generoso y apacible, bueno y leal, dinámico y perseverante, lleno de fe en su destino unió con su hazaña el Pacífico Guayaquil, sus ríos navegables, las cordilleras andinas, los valles serranos, el pie de monte oriental, la selva y el gran río con el Atlántico.
2 comentarios:
Francisco de Orellana nace en 1511 en Trujillo, España.
Te envío un enlace a su Casa Natal.
http://www.casadeorellana.com
Gracias,
josejalon@gmail.com
Me ha interesado mucho su artículo, pues trabajo en documentación.
Por favor, si quiere compartir información, no dude en hacerlo. Puede visitar mi pequeño blog (no mayormente de documentación, lo lamento) laasneida.blogspot.com (con www. delante) , o contactar por correo electrónico.
Un saludo, y gracias por la agradable lectura.
ANA BALIÑAS PÉREZ. Extremadura. Spain. Península ibérica. Región sudoeste.
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